Pilar Ortíz García. Profesora Departamento Sociología Universidad de Murcia. Cátedra Empresa Familiar Universidad de Murcia.
La Opinión - Encuentros mayo 2011
En el marco de la investigación impulsada desde la Cátedra de Empresa Familiar de la Universidad de Murcia y AMEFMUR, en 2009 se llevó a cabo un estudio sobre una muestra de 433 empresas familiares de la Región cuyos resultados, por su relevancia, merecen ser objeto de análisis.
De las diversas perspectivas desde las que se abordó la empresa familiar en esta investigación, hay una especialmente interesante. Se trata de la orientación de la empresa o modelo cultural desarrollado por ésta. Para describir la orientación preferente de la empresa familiar murciana, se utilizó un modelo que caracteriza la cultura empresarial en cuatro grandes tipos en función de cuatro ejes: la orientación hacia el interior frente al exterior de la empresa y la cultura centrada en la estabilidad frente al cambio y la innovación. Las empresas con una Cultura Clan y las empresas con una Cultura Jerárquica, se caracterizan por desarrollar una orientación hacia los aspectos internos de la empresa. La diferencia entre ambas radica en que las empresas con una orientación al clan, priman aspectos como la cohesión, el sentido de la familia o el trabajo en equipo, mientras que en las empresas con orientación jerárquica están especialmente preocupadas por la estandarización de los procesos, la jerarquía y la estabilidad organizativas. En un extremo opuesto estarían las empresas con una orientación Adhocrática cuya estrategia se centra en el exterior, la innovación y la creatividad. En esta misma línea se sitúan las empresas con una cultura de Mercado en las que la preocupación por el cumplimento de los objetivos y la competitividad en el mercado son los aspectos definitorios.
Siguiendo esta clasificación, aunque teniendo en cuenta que no se puede hablar de modelos puros, sino de características que marcan una orientación o estrategia dominante, obtuvimos un perfil de la empresa familiar murciana marcada por su orientación de Mercado. En segundo lugar, obtuvieron valores elevados los indicadores que apuntan hacia una cultura Jerárquica. Por debajo de estos valores medios, se encontró la alineación de estas empresas con culturas como la de Clan o la Adhocrática.
El análisis de este perfil nos llevó a una primera conclusión. En las empresas familiares analizadas predomina una orientación hacia los “procesos mecanicistas”, es decir, aquellos que enfatizan en el control en la gestión, el orden y la estabilidad, características que se dan en los perfiles culturales dominantes. Por tanto, se trata de una orientación encaminada al mantenimiento de los resultados y cumplimiento de los objetivos más que a la innovación o la flexibilidad en la gestión. Esta conclusión también está en sintonía con la hipótesis teórica sobre la supremacía del conservadurismo en la cultura de las empresas familiares que mantienen algunos expertos.
No obstante, la orientación de Mercado se impone entre las empresas familiares murcianas analizadas y éste es uno de los aspectos más interesantes, sobre todo, si se da por buena la hipótesis de que una orientación hacia el mercado, los objetivos y los resultados empresariales, suponen un factor de éxito empresarial, frente a una cultura excesivamente cerrada hacia el “clan” o los intereses accionariales, una tendencia nada extraña entre las empresas familiares.
