Antonio Carrasco Hernández
Cátedra de Empresa Familiar Mare Nostrum. Profesor Departamento de Organización de Empresas y Finanzas de la Universidad de Murcia
La Opinión - 4 junio 2017
La empresa familiar es uno de los activos más importantes en el valor y riqueza de un país. España, y más concretamente la Región de Murcia, es una zona de negocios familiares (92% de las empresas), con las que se genera el 82% del PIB y el 85% del empleo del sector privado. Las medidas para potenciar la creación y/o continuidad de la empresa familiar han supuesto un reto a lograr para los diferentes agentes, directa o indirectamente, involucrados con estas organizaciones. Paralelamente, nos encontramos en la actualidad con un contexto social de alto desempleo juvenil, en el que surge la necesidad de colocar a estos jóvenes en empleos de calidad y de reconocimiento social. El autoempleo y la creación de empresas familiares puede ser una salida digna para estos jóvenes, que además comparten la premisa de estar altamente formados en muchos casos. Así, desde la universidad ha surgido la necesidad de ayudar a estos jóvenes, muchos de ellos universitarios, analizando los factores que favorecen la constitución de la empresa familiar, para intentar favorecerlos y potenciarlos.
Un reciente estudio desarrollado con universitarios ha mostrado que la formación es el factor más importante para la creación y desarrollo de la empresa familiar, sobre todo la formación en áreas de emprendimiento y dirección de empresas familiares. Esta formación mejora la actitud hacia el emprendimiento de estas empresas y da mayor seguridad a los jóvenes que deciden constituirlas.
Otro factor relevante en la constitución de la empresa familiar, y de preocupación para los jóvenes, es la financiación de la empresa en los primeros años de vida, hasta que el negocio logra estabilizarse. Se han desarrollado un gran número de iniciativas públicas y privadas en este sentido. No obstante, los jóvenes solicitan mayores ayudas, respecto a líneas de financiación y oficinas de asesoramiento para la constitución de un negocio familiar.
La red de contactos a la que tiene acceso el joven es crucial al constituir un negocio familiar, red que le puede venir al joven desde su propia trayectoria profesional, así como por la vinculación de la familia del joven con los negocios empresariales y con el mundo de la empresa. Se ha detectado entre los jóvenes mejor conectados, un mayor interés por crear y desarrollar negocios familiares. Aprender a crear una red de contactos, local, nacional y/o internacional es clave para el lanzamiento y desarrollo de una empresa familiar. Por último, y no por ello menos importante, se ha encontrado que la experiencia profesional y el conocimiento de un determinado ámbito o profesión, favorece la creación de negocios familiares. Todos estos hallazgos se traducen claramente en una recomendación a las instituciones políticas, empresariales, sindicales y universitarias en el sentido de promover la formación, potenciar la financiación y ayudar a la creación de redes de contactos desde las que potenciar la creación de estas organizaciones.